Al fin pudimos celebrar el último congreso, dos veces pospuesto por motivo de la pandemia. Conseguimos reunir a 21 ponentes de un altísimo nivel científico, muchos de ellos catedráticos de diferentes universidades, con reconocido prestigio internacional..
Alrededor de 200 médicos participaron en los talleres y asistieron a las ponencias.
Fue un congreso importante, por una triple celebración, por el reencuentro tras el parentesis impuesto por la pandemia, porque celebramos el centenario de la Medicina Naturista española y el 40 aniversario de nuestra asociación.
Además tocaba renovar los cargos de la Junta Directiva, lo que se ratificó en asamblea extraordinaria en la que se presentó una sola candidatura. Ojalá, en próximas elecciones las candidaturas sean varias, síntoma de buena salud de cualquier organización.
El resultado de este congreso ha sido un alto grado de satisfacción, tanto de los asistentes como de los ponentes, con la excepción de valiosas opiniones diversas.
De este congreso, incluso han surgido las bases para futuros convenios de colaboración entre centros de investigación de diferentes universidades.
El congreso, dedicado a la longevidad saludable, fue inaugurado por el eminente Dr. José Sabán, Director del Programa Endotelio, Medicina Antienvejecimiento y Salud Cardiometabólica, que impartió una magnífica conferencia en la que nos habló de la importancia del endotelio como diana del envejecimiento.
Y, entre la actividad extra científica, cabe señalar la presentación y emotiva interprestación, a cargo de la soprano Blanca Ortiz, de un estreno, se trata de una romanza compuesta por el insigne Dr. D. José de Letamendi y Manjarrés, precursor de la Medicina Naturista española.
En definitiva, un memorable congreso, en el que bajo la eficiente batuta de la Doctora Beatriz Granero, pudimos compartir conocimiento, aprender y disfrutar en un ambiente fraternal, que solo entre la singularidad de quienes concebimos una manera más coherente de ejercer la medicina puede darse.